martes, diciembre 15, 2009

PALLADIO en Fundación La Caixa.


Vaya una suerte la de los arquitectos renacentistas. Ahora resulta casi imposible saber de todo. Este Andrea consiguió un “sueldo para toda la vida” (como del Nescafé) y se dedicó a pensar y repensar sobre sus encargos. El más importante el de la rehabilitación de nosequé palacio medieval para sede del ¿Ayuntamiento? de Vicenza. Lo que hizo es digno de admiración, sin duda. A ver si soy capaz de transmitirlo:

Como los vanos del palacio original no seguían un orden armónico, buscó y buscó hasta que diseñó un orden clásico que sí lo era, pero con una particularidad que fue la de dividir cada vano en tres partes; de ellas la central era idéntica siempre, y absorbió las diferencias en los laterales. Así es apenas perceptible la disonancia. ¿A que es ingenioso? Tomaremos nota.

Si podéis no os la perdáis, como no deberíais perderos la de Delhi Tejero que está más cerca, en Salamanca, hasta el 10 de enero.

jueves, noviembre 26, 2009

Atentos...

El próximo sábado intervendré en la Iglesia de San Agustín de TORO.
Pequeña charla de título:

LA GESTIÓN DEL PATRIMONIO.

Si puedo, colgaré el video que van a grabar.

sábado, noviembre 21, 2009

DELHY TEJERO y familia







Ayer estuvimos en la Iglesia de San Agustín, fantástica rehabilitación a cargo del equipo de Javier Vila Tejero, "aparejatriz" y mi Cicerone en Toro. Nos quedamos bastante "flipaos" cuando nos enseñó la cúpula, que está cubierta por un cubo y una pirámide. Por un lado bloquiabiertos al contemplar la obra de Manolo Pousa, maestro escayolista y por otro, porque de sus paredes, cuelgan numerosos cuadros de esta pintora toresana, que es tía materna de Javier, desconocida para mí hasta este verano, pero ya inolvidable.

Precisamente ahora, una muestra de 200 obras de las 800 suyas recorre las capitales de Castilla y León, en Salamanca del 10 de diciembre al 10 de enero por Caja España. No os la perdáis, daos ese regalo de Navidad y habréis hecho ya algo bueno, sin necesidad de gastaros ni un euro.

No es exageración, podéis mirar en la Wikipedia o buscar enlaces si os apetece. A nosotros ayer nos recordaba muchísimo a Picasso (fueron contemporáneos) y como él, no paró de investigar en toda su vida. Teniendo en cuenta que nació en Toro a principios del siglo XX es doblemente meritorio, ¿no os parece?

jueves, noviembre 05, 2009

Palacio de Fuentesaúco.




El sábado pasado fuimos de excursión a ver este Palacio. No recuerdo con precisión si se llama así, pero qué más da. Está catalogado, por supuesto, y adjuntaré su ficha en cuanto pueda.

La escalera sube a una planta modernista que me reservaron para otro día.

Patios del Palacio.


El otoño acababa de hacer su erupción y aquí se puede ver en detalles de los patios.

Las cosas de Palacio...




... ¿van despacio?

Detalle de uvas secándose para "uvas pasas" exactamente igual que hace tres siglos.
El lagar igualmente restaurado tal cual fue, aunque ahora no haga vino. Todo un ingenio mecánico.

Bodega y todo.


Numerosos detalles de buen gusto, como este de las botellas. La bodega es de verdad pero de mentira. Esto tiene su explicación: está restaurada "a la manera de " pero no tiene uso de bodega propiamente dicha. Me recordó a una frase genial del también genial Julio Cano Lasso, que dijo en mi presencia que para que una obra de arquitectura sea buena, tiene que ser bueno el promotor. En este caso, el propietario es un elegante señor Profesor de Historia de la Universidad de Valladolid: José Antonio del Pozo, quien tuvo la gentileza de enseñarnos su palacio.

viernes, octubre 30, 2009

Ladrillos otra vez


Las bodegas suelen ser de piedra tipo arenisca, llamada "greda", que es el terreno en estado natural, duro en seco pero completamente disgregable con la humedad.
Las de las casas de las familias "de posibles" ya son de ladrillo, faltaría más... En ésta que fuimos a ver nos sorprendió éste de muescas.
La manita es servidora.

Zulos y pasadizos




El zapato es un truco que utilizo a menudo para que se perciba la escala.


A Julieta Leoz, que además de colega es toresana.







Las bodegas familiares tienen con frecuencia respiraderos o pasadizos como éste que van a dar a la calle u otro espacio público. No escribo más. La imaginación es libre.

miércoles, octubre 28, 2009

Bodegas familares


La ciudad donde curro está completamente horadada como subsuelo repleto de hormigueros: son las bodegas de uso familiar, ya que en cada casa tenían su sótano.
Ayer fui a ver una con la aparejadora. Normalmente le corresponde a ella pero quise ir esta vez porque esta bodega es muy particular: es de un constructor charro (el único sensible que conozco) que se casó contra una toresana. Se ha rehabilitado la bodega y piensa comercializar vinos de verdad. Para que le otorguen la categoría de "Denominación de Origen" necesita la licencia municipal de actividad y esa fue la razón de la visita.
La obra es una muestra de buen gusto y conocimiento del tema. Ha instalado un complejo sistema de ventilación para el control de la humedad y otro más complejo aún sistema de canalización de aguas, que es la guinda del problema: al final todo es cuestión de humedades.

El caso es que ahí os he dejado unas fotitos para que veáis. Nos gustó mucho el ladrillo con esas muescas nunca vistas por servidoras.

domingo, octubre 04, 2009

Profesora, profesora...

De mis dos años de docencia en la USEK (Universidad de San Estanislao de Kostka) de Segovia, cuyo nombre tiene una curiosa historia, recuerdo a sólo algunos de mis alumnos -no he coincidido después con ninguno-. No he vuelto por Segovia, a pesar de ser una magnífica ciudad. Hoy es el Instituto de Empresa (IE) y tiene en proyecto otra bonita historia. Tantas historias para dos días que vivimos.
Fueron los cursos 2002-2003 y 2003-2004. Tuve tres grupos:
- Oficina Técnica en Aparejadores.
- Urbanismo II de Arquitectura y
- Ecología Urbana, también de Arquitectura.
Sensación de que los alumnos te vampirizan: acababa agotada después de cada clase. Te pillan a la mínima: saben perfectamente cuando estás “de vuelta” en un tema y cuando la clase es “de relleno”. Se nota en sus caras.
Fui algo blanda y mala: confieso que a todos los que iban a clase habitualmente y el día de la prueba final habían cumplido, les aprobaba (ya ni recuerdo los exámenes). De esta forma yo no tenía que ir un día más en septiembre.
Cualquiera que lea esto me imaginará experta en cuestiones extrañas y todo fue tan, tan casual… No lo contaré para no aburrir al personal. Otra historia que me-os debo.
Lo que sí se me quedó grabado es la poca seriedad de las universidades privadas: nadie controla la calidad de la docencia, ni la congruencia de los programas, nada de nada. Lo único que controlaban era la asistencia (la de los profesores).
No sé cómo será ahora en las ETSAs; tal vez en la pública el pitorreo sea similar.